Guy Pearce (Memento).
Todos guardamos en la memoria nuestro primer amor como una luz que no cesa.
...Aquella primera mirada de brillos llena buscando su reflejo en nuestra pupila... las manos torpes intentando un roce esquivo... ese primer encuentro de febriles labios ávidos de vaciar el deseo... la rosa robada en cualquier parque y que se marchitaba en nuestras manos recordando aquel paseo entre jardines… los diálogos monosílabos ocultos detrás de la vergüenza… promesas de amor escritas con jirones del alma… ventanas que reflejaban los sueños de unos ojos perdidos en la nada…
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Y la primera vez que nos dejaron el corazón roto... aquella despedida que nos fijó los pies en la tierra con todo el peso del cielo sobre los hombros... aquellos ojos agachados, nerviosos, que dejaron nuestra mirada llena de vacíos... ese dolor inmenso que hacía añicos nuestro interior como una taladradora carnívora y despiadada... esa sombra que se deslizaba por nuestra piel colgándola para siempre de la pena…
Muy emotivo, ELENA. Aquellos años de entre los 14 y los 18, con novios y novias que forzosamente desaparecian.
ResponderEliminarExcelente.
Y algunos menos mal que desaparecían.
ResponderEliminarNo me veo yo ahora con...
Un abrazo Tellagorri.
Yo tengo buenos recuerdos, no suelo pensar en ella, pero de vez en cuando y de cuando en vez, si me detengo un ratito para y si...
ResponderEliminarVes ahora mismo me has "obligado" a recordarla...
Siempre que visito tu casa, recuerdo y eso me gusta.
Un abrazo Elena.
Bueno, si los recuerdos son reconfortantes, bienvenidos sean ¿no?
ResponderEliminarGracias por visitarme Javier.
Un beso.
Gracias Mª Carmen, por tu visita y por tus palabras siempre acertadas.
ResponderEliminarUn beso, buenas noches.
Hola Elena. Es cierto lo que dices. La primera imagen siempre queda y es imborable.Aún recuerdo esa primera vez. Era una muchacha morenita, callada, pero con una bella sonrisa y muy alegre. Hoy día, cuando viene y la veo, me recuerda esos amores que nunca se olvidarán. un beso amiga, hasta otro ratico.
ResponderEliminarHe cambiado la foto por esta que me gusta mucho desde que comencé y ahora la he puesto. No es que me desagrada mi foto.Pero estaba harto de verme. AU REVOIR.
Si esa muchacha te trae buenos recuerdos, estupendo, más vale así.
ResponderEliminar¿Y a ella, le traes buenos recuerdos tú? Jajaja... ¿Te portaste bien?
No me hagas caso, es broma.
Un beso, MERCI BEAUCOUP.
Cuando me pusiste a recordar a nuestros profes mas entrañables... en mis estantes del alma uno destacaría siempre y pensé que no estaría mal escribir al primer amor...me has pisado la entrada , queridísisisisma amiga..., suena a topicazo de película, pero mi primer amor fue un profesor, jeeee. Y con todo creo que la escribiré.
ResponderEliminarBesitos de margarita deshojada.
Dicen que la primera impresión como la priemra experiencia jamás se olvida..
ResponderEliminarGrax por pasar a leer mi espacio... el tuyo es realmente lindo.. lo sigo desde ya.. un saludo!
Ana es muy normal que nos pisemos temas en este mundo bloguero. Escribe tu experiencia, el tema será el mismo pero visto desde otra perspectiva y contado de otro modo.
ResponderEliminar¿Margarita deshojada? Me preguntan por aquí que quién se ha atrevido.
Besitosssss.
Zully me encantará tenerte por aquí. Siéntete como en tu casa. Yo visito la tuya con frecuencia, la encontré a través de mi querida Ana (Re-creando momentos).
ResponderEliminarBesos y bienvenida.
El primer amor, el primer beso..¡Qué recuerdos más bellos! Creo que nunca se vuelve a querer a nadie se se quiso aquella primera vez.
ResponderEliminarGracias, Elena por traernos estos bellos recuerdos que afortunamente todos hemos vivido.
Un abrazo.
Sí Fernando, la primera vez de todo es la que más profunda huella nos deja, será por la experiencia de lo nuevo. Y cuando se trata de las pasiones humanas, con más razón.
ResponderEliminarUn beso.
Es cierto que aquel amor primero nunca se olvida, porque nos llevó de la mano en nuestro despertar de esos sentimientos adultos, de la pasión, de los sentidos...
ResponderEliminarRecuerdo que estaba envuelto en un halo de misterio a las puertas de un mundo desconocido que nos prometía cosas maravillosas, pero que raramente llegaríamos a vivir en su compañía.
Por eso, con el paso del tiempo, nos queda el recuerdo imborrable de la ilusión en lo que no llegamos a descubrir, de lo que pudimos haber hallado tras esa puerta que no traspasamos.
¡Ayyyy qué bellos amores platónicos!
Amores platónicos que iban irremediablemente unidos a las edades tempranas, por eso los recordamos con mayor cariño.
ResponderEliminarBesos, Adelaida.
Por fortuna queda lejos ese primer corazón roto, puede que sin olvidar aún, pero tapado por muchas otras vivencias.
ResponderEliminarAsí es Tawaki, además, el corazón tiene una gran capacidad para recomponerse, es admirable.
ResponderEliminarY menos mal que el tiempo todo lo cura, lo que nos parecía una tragedia, el tiempo lo convirtió en un recuerdo más.
Gracias por tu visita.
Un beso.
Hola Elena!! Qué bello es tu blog!! Gracias por la visita al mío. Tengo un problema con el feed que no pùde solucionar. Seguiré probando.
ResponderEliminarBesosssss
Pues a ver si lo solucionas porque me ha sido imposible enlazarte.
ResponderEliminarGracias por venir a ésta tú casa.
Besos.
Hola, Elena. Antes de nada, como paisano tuyo que soy agradecerte que traigas por aquí cosas de mi Córdoba del alma que anhelo en la distancia. Conozco Nueva Carteya y es un lugar con unas gentes maravillosas y entrañables...
ResponderEliminarYo aún recuerdo ese corazón roto cuando hace ya, no recuerdo tanto, me dijeron "adios". Con la distancia sabia del tiempo me produce una leve indiferencia, pero si me detengo, pienso, y busco dentro de mi, renace ese dolor que me desgarro aquella desapacible tarde de otoño...
Desconocía el triste final del "Hombre del Rio" porque llevo ya muchos meses fuera de Córdoba, pero tus palabras me han parecido hermosas y ensoñadoras. Desde ahora, lo tengo en mi recuerdo de otra manera...
Muchos besos, y ya te leere por aquí.
Vaya una sorpresa, no sabía que eras cordobés.
ResponderEliminarPara mí será un honor que me visites. Tu blog me ha parecido muy interesante, hoy lo visité a través del de Gabriela, llevaba días buscándote y por fín pudo ser.
Un abrazo y gracias por tus palabras.
Veamos...que esto se va a parecer a explicar un chiste...veamossssssssss
ResponderEliminarHablas de amor, del primer amor.... a verrr...que levante la mano quien no ha deshojado margaritassss!!!!! me quiere, no me quiere......me quiereeeeeeeeeeeeee...no me quiere...me quiereeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee, no me quiere.... y así hasta dejar a la pobre margarita más achinchetada, desnudita...
Besitos de me quiereeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee.
Pues yo si que me acuerdo de aquella etapa de mi vida, aquella edad..., de aquellos maravillosos años, aquellos amores tempranos, aquellas ilusiones, y como no desilusiones!!!, lo recuerdo y, me gusta..., pero tampoco creo que me marcaran mucho la vida. Creo que mi vida quedó marcada muchos años después a aquella primera vez.
ResponderEliminarUn beso para todos!!!.
¡Uyyyy... Ana la de margaritas que descabecéeeee..., pobres!!
ResponderEliminarMejor así Lola, para qué andar desperdiciando el tiempo pensando en amores pasados. ¡A disfrutar de los amores presentes!
Besotes.
Fragmento de " Sin tu latido " L.E Aute
ResponderEliminarQue el final de esta historia,
enésima autobiografía de un fracaso
no te sirva de ejemplo,
hay quien afirma que el amor es un milagro
que no hay mal que no cure
pero tampoco bien que le dure cien años,
eso casi lo salva
Ay amor mío, ay amor mío
Correspondidos o no, si que es cierto que se recuerdan esos primeros amores, pero como bien alguién dijo por aquí, esos amores están bien tapados por nuevas vivencias y es el amor que tenemos presente el que hay que cultivar cada día como si fuese el último
Un besote resala
No has podido describir mejor aquel corazón roto... aquel astillado en el alma que siempre permaneció.
ResponderEliminarBesos, paisana. Nos une el amor por los blogs, y la carretera de Cabra.
Preciosa letra de Aute, no se puede escribir más bonito.
ResponderEliminarLlevas razón, A.J., lo importante es vivir el amor presente con toda la intensidad, al fin y al cabo es lo que tenemos palpable, besable.
Besos para ti.
Hola Onminayas, bienvenido y gracias por tu visita y por tus palabras tan generosas.
ResponderEliminarYa visité tu blog en alguna ocasión y me encantó, ¿sabes?, es que el cine me gusta mucho.
Te seguiré, un abrazo.
Hola Elena, volví para avisarte que tengo un regalo en mi blog,ojalá te guste
ResponderEliminarBesosss