“El verano es una estación triste en la que nada crece. […] La canción del verano es siempre la peor canción del año. El amor de verano es un subgénero del amor […] Hablan de lecturas de verano, noches de verano, viajes de verano, bebidas de verano y con ello queda implícito un sutil desprecio. Nuestro amor no está hecho para el verano. Nuestro amor no conoce vacaciones.”
David Trueba “Cuatro amigos”
Te marchaste tan de puntillas que aún me parece escuchar tus risas rodando calle abajo, queriéndose colar por las rendijas de mi ventana, camufladas tras la oscuridad de la madrugada.
Aquí todo está descolocado aún, quedan cortinas por lavar y sábanas revueltas con tu olor y tu sudor impregnándolo todo, y encima afuera llueve como si Septiembre quisiera borrar tus huellas sobre el asfalto caliente. Y a pesar de que mi paisaje perfecto lo dibuja la lluvia y el frío, siento en el centro de todos mis centros la punzada de la pena; gris y desierta como una plaza sembrada de confetis al día siguiente de una fiesta.Hoy salgo a la calle a despedirte, busco tus huellas por entre las sombras de las aceras, pero Septiembre ha borrado tu rastro sobre el asfalto caliente, y tu nombre de los calendarios.
DOÑA, vives en un lugar equivocado. Lo tuyo es Galicia, Asturias, Cantabría y País vasco, en donde ibas a hartarte de lluvias, nieblas , fríos húmedos.
ResponderEliminarLo cierto es que cada quién anhela lo diferente pero cuando eso llega es dificil adaptarse. Yo reniego de las lluvias y fríos, pensando en lugares cálidos y soleados pero cuando salgo de mi tierra la echo de menos mucho más de lo que creía.
No te quito la razón Javier, pero es que el verano aquí es demasiado largo y agota al más "pintao", aunque sé que me pasaría como a ti, uno se acaba acostumbrando a lo que tiene y lo valora cuando le falta. Siempre ha sido así.
ResponderEliminarUn abrazo.
La lluvia de hoy, por aquí leve, la he acogido con ganas. Y es que el verano del corazón andaluz tiene guasa. La calor extrema se soporta pero nunca te acostumbras, sobre todo trabajando sin sombra cerca.
ResponderEliminarUn abrazo
bellísima elegía, con algo de pianista, sobre el verano que se fue, casi antropomorfizado amorosamente, que se está marchando.
ResponderEliminarSaludos blogueros
Hola Juan, por aquí también ha sido leve pero no veas como se agradece. Ahora mismo hace un fresquito estupendo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Así es José Antonio, a mí no me gusta el verano, me cansa, me agota, pero sus últimas tardes me retrotraen a mis veranos infantiles y la tristeza que dejaba por las calles la recién acabada feria.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Qué tristeza de olor de jazmín! El verano...
ResponderEliminarNo fue un agosto largo ni fue breve:
sin duración, aún no se ha terminado;
amanecida y noche lado a lado,
a persistir en el calor se atreve,
así persistiremos: encendidos
hasta sobrevivir en los crujidos
de aquel agosto de aire y osadía,
donde la noche se desvanecía
blanco en lo blanco, estábamos erguidos
como el brillar del corazón del día.
Un abrazo.
Gracias Luis una vez más por tus versos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Elena, tenemos más cosas que nos unen pero en lo tocante al verano, mientras tú te paseas en el polo norte mentalmente, yo sueño con la cálida brisa tropical.
ResponderEliminarQue le vamos a hacer para gustos están las estaciones.
Por desgracia "Septiembre ha borrado tu rastro sobre el asfalto caliente, y tu nombre de los calendarios"
Ale a disfr¡utar del Otoño que los demásd hemos disfrutado del verano:)
Besos gordotes de una friolera
Katy, yo también me apunto a la cálida brisa tropical, pero lo que aquí hay no es una cálida brisa, aquí te atorras bajo unos 40º a la sombra.
ResponderEliminar¿Te imaginas juntas decidiendo adónde vamos de vacaciones? ¿crees que al final nos pondríamos de acuerdo? jajajajaja...
A mi todavía se me está haciendo largo...no te digo más!!
ResponderEliminarUn besazo guapa
Hola Elena!! Hermoso relato amiga. Nosotros estamos esperando ansiosos la primavera.
ResponderEliminarMe encantó la forma de describir los últimos días de agosto.
Besossss dulces
"Como una plaza sembrada de confetis al día siguiente de una fiesta". Te imagino por las estrechas y empedradas calle de Córdoba cabizbaja. En esa nos encontramos y nos reconocemos; no era a mí a quien buscabas, pero te sale el impulso anfitrión y compartimos mesa en un café y hablamos de nuestras cosas. Yo te desvelo algunas de mis miserias y tú me colocas en el sitio que me corresponde; tú me hablas de ti y mi admiración aumenta. Te pones a mi izquierda para no tropezar con la muleta y seguimos paseando la judería como si fuéramos los únicos habitantes de la tierra. Al caer la tarde me acompañas a la estación del AVE y nos despedimos con lágrimas: las despedidas siempre son tristes. En el beso noto tu afecto y lo atesoro como un sueño al final del verano.
ResponderEliminarEspero que Septiembre sea un poco más magnánimo con nosotros y nos traiga algo de sol, porque lo que es Agosto ha traido poco.
ResponderEliminarUf, Nerim, si a ti se te hace largo con 25º de media, la que no te dice más soy yo.
ResponderEliminarUN beso.
Gabriela, qué extraño se me hace un Agosto en invierno.
ResponderEliminarYa se acerca la primavera a tu casa, y a la mía el otoño.
Un beso.
Y en la estación del AVE me dejas agitando un pañuelo por dentro, volverás el verano que viene, y seguiré contándote de mis cosas.
ResponderEliminarUn abrazo Francisco.
Ay Mamuma, nadie está contento con lo que tiene.
ResponderEliminarUn abrazo.
Preciosa despedida al mes de agosto.
ResponderEliminarHoy noto que el verano se acaba. Todavía en la playa, septiembre nos recibió con una tormenta nocturna, el aire , los truenos , la lluvia no anuncia que debemos ir preparando la vuelta.
Un beso .
Te doy la razón...¡qué largo se hace el verano!..pero no nos desesperemos que este agua de hiy no creo que de paso al otoño, sera un engaño, como siempre, que luego nos viene el veranillo del membrillo.
ResponderEliminarMe alegro de que estés bien. Yo ya de vuelta.
Besitos
Mira yo, que hoy estoy hecha polvo, ando entrando y saliendo de la terraza con mi libro, que si sale el sol y me achicharra, que si una nube juguetona se pone de txapela y el viento aprovecha para darme unas ligeras bofetadas...
ResponderEliminarNo, nunca estamos contentos!
Y, oiga, bellísima su despedida! Estará encantado don Agosto!
Besitos, guapa!
;)
Recuerdo que hace unos días nos visitaron unos amigos sevillanos que vinieron al norte en busca de fresquito. Nosotros, muy corteses, nos desvivimos por por hacerles la estancia agradable acomodándonos a ellos, modificamos nuestra temperatura y les recibimos con 42º que era la que tenían ellos en su Sevilla.
ResponderEliminarMe da la impresión de que no acertamos. Saludos
Chelo, tenía que ser espectacular esa tormenta sobre el horizonte.
ResponderEliminarUn beso.
Ya sé Mª José, aquí el verano dura hasta finales de octubre, y se hace interminable, pero se agradece esta tregua.
ResponderEliminarUn beso.
Sí Mª Carmen, sé que aún quedan coletazos de verano, no deja el paso al otoño tan fácilmente.
ResponderEliminarUn beso.
Edurne, ya sé que en el País Vasco lleváis un veranito de lo más divertido, con más lluvia que sol.
ResponderEliminarGracias Edurne.
Un beso.
Anda que ya te vale Felipe, a quién se le ocurre recibir a un sevillano con 42º, es que no tienes perdón.
ResponderEliminarUn abrazo.
Delicioso texto envuelto en cálidas nostalgias. Un placer leerte y seguirte. Me encantó tu blog. Un abrazo.
ResponderEliminarÁnimo, que el verano ya toca a su fin y ya verás como terminas encontrando esas huellas que buscas.
ResponderEliminarUn beso.
Muchas gracias Alma, el placer es mío por tu visita.
ResponderEliminarSiempre serás bienvenida.
Un abrazo.
Tawaki, amigo, no veas las ganas que tengo, aunque este fin de semana he disfrutado de una brisita muy fresquita.
ResponderEliminarUn beso.
Otro de Córdoba
ResponderEliminarhttp://pasosencontrados.blogspot.com/
Elena guapa, veo por tus últimos escritos que has vuelto con el espiritu creador a tope.
ResponderEliminarMe gusta leerte, me trasmites un cúmulo de sensaciones que me enriquecen siempre.
Besos.
Soy Maripaz
Anónimo, ya me pasaré por tu casa.
ResponderEliminarMuchas gracias Maripaz, tú siempre tan generosa.
ResponderEliminarUn beso.
Septiembre recolocando los sentimientos. Y nosotros sin haber estabilizado la prima de riesgo.
ResponderEliminarUn abrazo, Elena.
Muy bueno Lavela, ya ves, al menos somos dueños de nuestros sentimientos.
ResponderEliminarUn beso.