“Todo va a ningún sitio… Vivir es sólo un empeño,
un propósito firme de alguien que no está vivo y que lo sabe.”
Antonio Gala “Los papeles de agua”
A veces tengo la impresión de que jugamos una partida de cartas con la vida sentada enfrente de nosotros en la mesa de juego, y a pesar de que guardamos un as en la manga que nos sostiene la sonrisa, la vida siempre gana la partida porque juega con cartas marcadas. Queramos o no, ella siempre será la última en mover ficha en un juego macabro con idéntico ganador. Y a nosotros no nos queda más salida que retroceder en el tablero, acorralados, al fondo, en la última casilla. Y temblando de miedo como una hoja de papel embestida por el viento.
Sé fuerte, debes ser fuerte, tenemos que ser fuertes. Es lo que todos nos decimos en los momentos duros como si repitiéramos una letanía religiosa en busca de la salvación eterna. Pero qué significado tienen esas palabras para quienes la vida a veces les viene grande, como si se hubieran comprado unos zapatos tres números más que se salen al caminar. Imagínate al correr.
A veces la vida nos agarra por la cintura y desliza el reflejo de nuestros pasos a lo Ginger Rogers y Fred Astaire sobre un damero con reflejos verde esperanza, nos eleva, nos sacia las ganas y deja que reposemos nuestra cabeza sobre sus hombros, pero siempre acaba dándote jaque mate al final de la melodía.
La vida sólo es un zapato holgado o demasiado estrecho provocando rozaduras en los pies. Imagínate al bailar.
Elena...
ResponderEliminarPero por otro lado hemos de agradecerle a la vida que sea nuestra compañera mientras jugamos esa partida, aunque sepamos que ella resultará vencedora. Disfrutar en su compañia, sonreir, plantar cara a los malos momentos y, mejor, andar descalzos entre las flores...
Un beso, paisana
Félix, es cierto que lo único que tenemos es la vida, lo malo es que ella, que nos acompaña siempre, es la encargada de darnos el jaque mate como si no le importáramos. Como si no nos conociera.
ResponderEliminarUn beso.
Eso hacemos Mª Carmen, fingir que el baile nuna acabará. Y el problema no es que acabe, sino las rozaduras que nos provoca cuando bailamos.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Elena...
ResponderEliminarSe que no es fácil... pero si la vida nos da limones... ¡hagámosnos LIMONADA¡ :)
Un beso, paisana
La vida puede ser grata o ingrata, depende un poco de lo que esperamos de ella, de nuestras expectativas.Es tambien una linda oportunidad de lograr nuestros sueños aunque eso implique ciertos riesgos.
ResponderEliminarUn abrazo cariñoso y que tengas una grata semana.Rayén
No Félix, si ya hago limonada, lo que pasa es que está tan fuerte la puñetera... y mira que le echo azúcar.
ResponderEliminarRayén, cierto todo lo que dices, de hecho creo que vivir es lo más bonito que nos puede pasar, pero eso no quita para ser conscientes de que a veces la vida te da unos palos muy gordos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Reverendísima
ResponderEliminarNo creo que sea la vida la que nos da jaque mate, sino la No Vida, es decir la muerte de esa vida. Pero, en efecto, vivir es un permanente sobresalto que nos zarandea y nos da revolcones, disgustos y alegrías.
Nuestros cerebros, afortunadamente, están programados para recordar más los buenos momentos que los malos, que son muchísimo más abundantes.
A propósito de todo esto hace tiempo salieron unos biólogos afirmando que habían PESADO EL ALMA. Que con una balanza ultra-sensible habían colocado a un moribundo en ella, lo tenían marcando su peso y que en cuanto dejó de respirar se notó en la balanza una ligera bajada de peso.
Todo esto se demostró que es falso y que el "alma" no es otra cosa que unos circuitos electrónicos de nuestro cerebro que guardan memoria de nuestras acciones : lo que los curas llamaban CONCIENCIA.
Todo este rollo viene a cuento de que, sabiendo que nuestra existencia va a ser dura y dificil (por ejmplo por causa de accidentes mortales o enfermedades de seres queridos), siempre tenemos un anhelo, dificil de ser vencido, de seguir con la VIDA.
La No Vida es lo duro y triste, e irremediable.
Como es habitual, has escrito un precioso conjunto de párrafos que iluminan la rutina del día a día.
¿Y qué hariamos sin esas rozaduras Elena?. Todo lo bueno que tiene la vida procede de un contraste con los malos momentos..Las rozaduras son como heridas de guerra, te hacen más sabia y más dura..aunque nunca del todo.
ResponderEliminarPerdona por preguntar en el otro post, parezco tonta..
Te mando mucho ánimo, porque presumo que nos queda mucho por bailar.
Un beso y mis mejores deseos para ti, para que seas feliz.
Bueno, es verdad que no suele tocarte la talla que te corresponde, que los zapatos, o se te salen o te hacen rozaduras al bailar. ¿Has probado a descalzarte antes de bailar?
ResponderEliminarSiempre es un placer leerte, aunque últimamente encuentro un tristeza y preocupación en tus letras.
Un abrazo.
Querida Elena...
ResponderEliminarEstamos tan tranquilos y una sombra negra y alargada nos desgarra el alma...llevándose a los que queremos.
Sabemos que la desgracia no descompensa la alegría por los buenos momentos...y a pesar de ello, entramos en un pozo muy profundo...cuya salida se antoja complicada...y las voces que oimos desde fuera suenan lejos...y nos sentimos impotentes.
Recuerdo una historia oriental, sobre un hombre rico que pidió a un sabio que escribiera en un papel palabras bonitas para cuando estuviera triste...El sabio escribió: 'muere el abuelo, muere el padre, muere el nieto'...Ante esto, el hombre rico se enfadó si bien encontró tras calmarse la belleza que encerraban.
Hay momentos en los que toca llorar.
Un beso, amiga...para toda la familia.
En este juego de cartas marcadas, trampas y guiños entre la vida y los mortales, tenemos en nuestra contra otro jugador que mira la partida sonriendo porque sabe que al final él o ella sera el ganador/a.Un jugador siniestro del cual solo sabemos su nombre, pues nadie sabe como és, nadie le ha visto,lo que nos crea incertidumbre y nerviosismo, a algunos incluso miedo.Por eso jugamos la partida mirando fijamente a los ojos de la vida, aferrandonos a ella, intentando hacer largas pausas para que la partida dure, nos volvemos quisquillosos con algunas jugadas, se las discutimos todas, y cuando llevamos buenas cartas y creemos que podemos ganar, canturreamos desdeñandola, y hacemos pequeños montones con nuestras ganancias, dispuestos a jugarnoslo todo.Y cuando la partida acaba, nada queda.
ResponderEliminarBuena reflexión Dñª.Elena. Un abrazo
Tella, lo que pasa es que la vida no es nada sin su cruz, o sea, sin la no vida. Y lo peor de todo no es que la vida de todos tenga los días contados, lo peor es la mala vida.
ResponderEliminarSería estupendo poder pesar el alma en una balanza, a ver por qué lado se decanta, si por los momentos felices o los desafortunados.
Un abrazo.
Sonreír, amar, sufrir, soñar, parte de nuestra vida, a veces con resultados certeros, eso es la vida luchar.
ResponderEliminarUn beso guapa.
Sí Candela, tampoco tendría mucho sentido una vida en la que sólo existiese la felicidad, sería como si siempre fuera Navidad o fiesta.
ResponderEliminarNo tienes por qué disculparte, no tenías por qué saber lo que pasaba. Los comentarios posteriores aclararon bastante.
Besos y gracias.
La vida es un enorme cúmulo de propósitos y despropósitos. Una montaña rusa llena de sube-bajas, un lienzo blanco que vamos emborronando, un enorme sacapuntas...
ResponderEliminarLa vida es tantas cosas amiga mía...
me encantó tu post.
Besos mil!!!
Mi querida Mercedes, no se puede bailar un vals o un tango que se precie descalza, jeje.
ResponderEliminarGracias por tus halagos, nunca me faltan y no veas cómo me animan.
Un beso.
Dadaista, son malos momentos que se dulcifican con los recuerdos. Yo tengo la suerte de tener los mejores recuerdos de una persona optimista, alegre, generosa.
ResponderEliminarGracias por tu comentario y tus deseos.
Un abrazo.
Manuel, mi reflexión queda pobre sin su magnífico comentario que la enriquece.
ResponderEliminarBuen resumen y mejor comprensión del post.
Gracias.
Un abrazo.
Sonrisa, luchar, ser fuerte, caer, levantarse..., ya sé, eso es vivir.
ResponderEliminarBesos para ti.
Pues sí querida Silvia, la vida es una maravilla y también la mayor mierda. Supongo que ese es su encanto.
ResponderEliminarUn abrazo.
Elena, espero estés mejor, al menos un poquito animada.
ResponderEliminarQue te voy a decir, la vida que nos toca vivir a cada uno es la que Dios o el destino nos tiene adjudicada, y por mas que breguemos es lo que hay, no nos queda otra que intentar vivirla lo mejor posible, poniendo tiritas o a veces grandes vendejas, para poder seguir danzado en ella.
Si nos deja vivir los años suficientes para poder estar al lado de lo nuestro y ese tiempo ser lo mas feliz posible, ya nos podemos dar por satisfecho, lo peor es cuando la vida se queda a medias, eso si que no se llega a aceptar.
Animo, y a seguir palante, los tuyos te necesitan ver feliz aunque la procesión vaya por dentro.
Un abrazo muy grande desde el corazón
Cordobesa, qué te voy a decir yo a ti, tu dolor tiene que ser insufrible a pesar del paso del tiempo.
ResponderEliminarAl menos a mí me queda el consuelo de los recuerdos de una vida larga vivida intensamente, disfrutada en cada segundo.
Gracias Luisa, un cariñoso abrazo.
Hola Elena, esta es la tercera vez que entro leo tu post y me voy porque no me dejas otra alternativa. ¿Que te puedo decir ahora?...
ResponderEliminarNi del post, ni de tus pensamientos, sentimientos y vivencias y esta experiencia dolorosa.
Solo que te siento, que me acuerdo de ti y que mi deseo es solo darte una brazo sin palabras.
Un beso
Esas rozaduras que nos producen los zapatos sirven para que sonríamos cuando nos los quitamos, que agustito nos quedamos!
ResponderEliminarSufrimiento y felicidad son las dos caras de la misma moneda.
Necesitamos del sufrimiento para valorar la felicidad.
No tienes que decirme nada Katy, sé que me tienes en tus pensamientos y eso me reconforta. Tus correos me dan vida, ternura y hasta me hacen reir.
ResponderEliminarTe siento cerca.
Un abrazo achuchao.
Así es Aspirante, tienes toda la razón. la vida es una moneda con dos caras complementarias, sin una no existiría la otra.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es la primera vez que te visito y ya me voy edificada.......gracias por ser.....Te seguiré. Eres positiva y lo transmites.En el rato que he estado en tu "casa", creo que ya te conozco y me ha gustado .Un abrazo madrileño.
ResponderEliminarLo mejor es no pensar en las rozaduras y seguir caminando. Si nos detenemos a reflesionar; nos duele más.
ResponderEliminarElena, un verdadero placer leerte.
Muchas gracias Elisa por haber dedicado tu tiempo a pasear por este callejón. Callejón que siempre te abrirá sus postigos.
ResponderEliminarUn abrazo cordobés.
Posiblemente tengas razón Mistral, pero a veces hay cicatrices que nunca dejan de supurar, y duele.
ResponderEliminarUn beso.
Creo que si, que la vida es una partida de cartas. No creo que tengamos un as en la manga, tenemos lo justo para seguir jugando hasta que ella quiere, hasta que considere que el baile terminó.
ResponderEliminarBella reflexión
Bésix
Gracias por tu comentario Calvarian, veo que estamos de acuerdo.
ResponderEliminarBienvenido, un abrazo.
Si le das otra vuelta al corazón. Será la vida.
ResponderEliminarBebe el elixir de los espejos hasta que los agote.
Una vuelta, sólo una vuelta más al corazón.
¿Lo oyes? ¿Lo recuerdas?
La vida que en las sienes sacude.
Un abrazo grande.
Luis
Lo oigo, lo recuerdo.
ResponderEliminarGracias por esa otra vuelta al corazón.
La vida me sacude en las sienes.
Un abrazo para ti Luis.
Te comprendo muy bien Elena, es muy facil decir ser fuertes, la vida es asi, pero quien sabe lo que hemos vivido, ahora vivimos, estan en nuestra piel, sienten los mismo? es facil hablar, pero quien lo padece no lo ve tan facil, porque lleva ya mucho sufrido, mucho andado, sufrido y ya no quedan fuerzas.
ResponderEliminarPrimavera
Gracias Primavera, el dolor se puede intuir cuando nos es ajeno, pero no lo sentimos en toda su dimensión hasta que nos es propio.
ResponderEliminarBesos.
Gracias Primavera, el dolor se puede intuir cuando nos es ajeno, pero no lo sentimos en toda su dimensión hasta que nos es propio.
ResponderEliminarBesos.
Elena la vida es dificil de entender muchas veces, pero no temeos otro remedio que caminar. Unas veces con zapatos y otras descalzos.
ResponderEliminarUn abrazo especialisímo
Gracias Maripaz, no nos queda otra que seguir caminando a pesar de las embestidas de la vida.
ResponderEliminarUn beso.
La vida es como un casino enorme, la casa siempre gana al final.. pero a veces te deja tener pequeños triunfos intermedios para que quieras seguir en ella.
ResponderEliminarBesos!!
Así es Cuetzpallin, gracias por tu reflexión.
ResponderEliminarUn beso.
Tener la satisfacción de vivir y encontrar felicidad en cada dia que andamos es la mejor partida. La vida es la que gana siempre pero me siento alegre por jugarle esa partida y enfrentarme a ella hasta que consiga vencerme. Esto es un juego y sabemos que cuando se llega al final , todo se acaba pero ahi que tener presente el camino que hemos recorrido. Un camino con sus risas, sus llantos, sus alegrias , sus satisfacciones y haber conseguido disfrutar...
ResponderEliminarBesos amiga. Eres un encanto.
Cuidate.
Al final esa es la satisfacción que nos queda, a pesar de ser conscientes de que la perderemos, la jugamos. Y hasta disfrutamos de algunos momentos en los que llegamos a ser felices.
ResponderEliminarUn beso Silencio.
Un beso.
ResponderEliminarLa vida es un sinvivir, ya lo decía mi abuela, que era una mujer muy lista sin estudios pero listísima.
ResponderEliminar"La vida sólo es un zapato holgado o demasiado estrecho provocando rozaduras en los pies. Imagínate al bailar" y esto que has escrito es tan cierto como la vida misma, no s epodría decir mejor.
Un beso
¡Cuantas veces juego con ella!
ResponderEliminarEstá cabreada desde que sabe que supe que no juega.
Un beso, cordobesa.
Vale que la partida la perdemos, pero mientras, intento hacer todas las trampas posibles y pasarlo lo mejor posible... y el blog es mi colaborador necesario.
ResponderEliminarHay veces en que tanto juego nos cansa... Pero, en fin, hay que saber ver lo positivo :) Un saludo.
ResponderEliminarOtro para ti Adelaida.
ResponderEliminarMe he alegrado de volver a verte por aquí.
Sí Mª José, nos empeñamos en que la vida es otra cosa que un "sinvivir", y las personas sabias como tu abuela tenían muy claro lo que era, lo que es.
ResponderEliminarUn beso.
Lavelablanca, explícame cómo lo has hecho.
ResponderEliminarUn abrazo.
Isra, claro que hacemos trampas, ya he dicho que nos guardamos algún que otro as en la manga.
ResponderEliminarY por supuesto, mientras jugamos, debemos pasarlo lo mejor posible. Una forma de pasarlo bien es visitar tu blog y por supuesto participar.
Un besote.
SS, es lo único que nos queda, pasarlo lo mejor posible.
ResponderEliminarGracias por tu visita.
Un abrazo.
Ha sido inesperado, Elena.
ResponderEliminarMe siento diez minutos cada día.
Un beso.
Estimada Elena...
ResponderEliminarme he acordado ultimamente de tí...Especialmente ayer al poner por la noche la televisión. Ya sabrás a lo que me refiero :)
sds!
PD. Quería agradecerte que me acompañaras el otro día por el infierno. Pienso que por desgracia no son ficticias y aún las habrá peores...Es un drama que hace seguramente a esos inocentes acabar celebrando que la vida les gane la partida a sus progenitores...Y es que viendo esto y aunque no lo pensaremos, no deja de ser una paradoja el poder llorar cuando un padre se vá.
También yo me acordé de ti. Siempre pienso el primer día que no me gusta ninguno, aunque poco a poco van dando juego y la verdad, entretienen bastante.
ResponderEliminarSiempre digo que hay gente que no se merece ser padre. Sin duda me alegraría bastante de que los padres de esos niños perdieran pronto esa partida, lo malo es que ellos han ganado una batalla de fuerzas desiguales contra los inocentes.
Un abrazo.
Espero que tengas un comienzo de semana relindo y si jugamos la partida sepamos que tenemos la de ganar siempre, no peder nunca la esperanza.
ResponderEliminarPrimavera
Feliz semana Elena.
ResponderEliminarGracias por tus siempres amables comentarios.
Saludos cordiales
La vida nos lleva demasiada ventaja en esta partida de póker, y contamos con muy pocas fichas para hacerle frente.
ResponderEliminarPero lo importante no es ganar, sino participar.
Un beso.
Eso hacemos Tawaki, participar, no nos queda otra, aunque ella decida cuándo se acaba la partida.
ResponderEliminarUn beso.