Hoy 8 de Marzo, día de la mujer trabajadora, dedico este post a todas las amas de casa del mundo, esas que no tienen un día internacional para celebrarlo.
"Cualquier mujer que entienda los problemas de llevar una casa
está muy cerca de entender los de llevar un país."
Margaret Thatcher
Suena el despertador. Son las 7:30 de la mañana. Otro día empieza repitiendo ritual. Levanto a mis hijos y les preparo el desayuno. Se marchan al instituto y me toca a mí tomar algo para mantenerme en pie hasta las tres. Jamás perdono el desayuno. Me dispongo a preparar el almuerzo que anoche me costó un buen rato de vueltas en la cabeza hasta la toma de una decisión. Mientras la olla chifla hago las camas. Primero la de mi hijo y después entro en la habitación de mi hija recolocando ropa en sus cajones, zapatos en sus cajas, camisas y camisetas en los armarios. Esta niña siempre tan desordenada, a quién le habrá salido. Aliso las sábanas y sale un cable volando, un día se va a electrocutar, se lo digo y no me hace caso. Ahora toca la mía. Qué es ese ruido. Debajo de la almohada una radio no para de charlar aun cuando nadie presta atención. Este hombre acabará sordo, siempre con los chicharitos en los oídos. Una ducha y a la calle para comprar sólo las cuatro cosas que necesito y que se transformarán en cuarenta. Cómo le temo a los “ya que”. Ya que estoy aquí, me llevo las patatas. Ya que he salido, aprovecho para comprar la carne del sábado. Ya que me sobra un euro lo gasto en una barra de pan y la congelo para no salir el domingo. Por el camino de vuelta a casa, tres bolsas llenas en la mano izquierda y otras tres en la derecha además de la barra de pan. Los dedos acabarán partiéndose. Iré soltando trocitos de dedos por la acera. El hombro derecho mantiene una lucha personal con la tira del bolso que irremediablemente acaba en la muñeca. ¡Otro peso más!
¡Oh no! El tirante del sujetador también sucumbe a la fuerza de la gravedad y frena en mitad del brazo. El calor se apodera de mi cuerpo. Empiezo a sudar. Me sobra la rebeca. No sé cómo se ven chaquetones por la calle. Qué lejos está mi casa. Llego y tras colocar la compra en los armarios de la cocina pongo una lavadora. Antes de almorzar leo y comento los blogs de los amigos. Para pensar y escribir en el mío no me queda tiempo. Son las tres. Hay que poner la mesa. Veinte viajes de la cocina al salón y del salón a la cocina. Comemos y recojo la mesa. Lavo los platos y me preparo un café. Me tumbo en el sofá y me dispongo a ver un poco de telebasura para distraerme. Cuando Belén Esteban está contando lo más interesante, un pitido desde el cuarto de pila me dice que la secadora ha acabado. Doblo la ropa y guardo la que no necesita plancha, la demás la plancho. El café ya es gazpacho fresquito. Y esta noche qué se cena. Si por mí fuera ponía un plato con aceite de oliva en el centro de la mesa y un trozo de pan para cada uno. Sano y natural. Pura dieta mediterránea. Un poco de ayuda con las tareas de mis hijos y después a ver si leo un poco. Este libro no lo acabaré nunca. Abro el libro y suena el timbre. El hijo de mi vecina pide mi ayuda para un comentario de texto. Suelto el libro y comento. Las nueve. Saco de la nevera una bolsa de yo qué sé congelados y los frío. Otra vez a poner la mesa, otros veinte viajes. Lavo los platos, cuántas veces habré lavado esta misma cucharilla. Hoy hay suerte, en la televisión ponen una buena película. No me preguntéis el argumento. Estoy pensando qué vamos a comer mañana.
Jeeee...cuñada ...me preguntaba yo si no estabas guardando este post para el día de hoy...
ResponderEliminarSoy bruja pero me lo he pasado pipa leyendolo así...seguidito seguidito como te lo oí a ti...
relájate...
E inventa algo que hoy no hacemos naica en casa. Yo , a las tres, cuando salga del insti me voy de parrandeo con 20tantas mujeres más...hoy nos ponen la comida por delante, no recogemos mesa ...y el cafelito de después vendrá con copita...puro, no, que no es glamuroso...
Y después....que nos quiten lo bailao.
Feliz día de la mujer...y pidamos que de verdad un día este día no deba celebrarse.
Chaito y besos de mujer.
Ufffff niña, decirte que sólo con leer tus actividades he acabado estresada. Pide ayuda, que te pongan la mesa los hijos ó el marido, así te ahorras los veinte viajes. Eso sí tienes que tener unos muslos cañón de preciosos tanto andar.
ResponderEliminarMe has hecho reir a carcajadas con lo de las bolsas, el tirante del sujetador que siempre se cae, es cierto.
Buenísimo, de verdad, qué risas leyéndolo.
Por cierto, qué vas a hacer mañana para comer???
Muchos besicos relajantes.
¿Te acordabas Ana? Ya creí que lo habías olvidado, jajaja...
ResponderEliminarMañana será un día como todos, o peor, tengo toda la tarde ocupada entre dentista y reunión en el instituto, ya ves.
Pero prometo tomarme un copazo de lo que sea por la noche, ¡ea!
Un beso...de mujer.
Emibel, era justo lo que pretendí juntando todos los renglones, que la forma y el fondo fueran uno.
ResponderEliminarPor cierto, para mañana ya tengo los garbanzos echados en agua para guisar un cocido. ¿Quieres un platito? jajaja...
Un beso.
Hola Elena!! Buenísimo amiga. Hiciste que una sonrisa asomara en mis labios. Tengo la misma vida de ama de casa agitada. Dios!!! Hasta cuando logramos sentarnos estamos pensando que podemos adelantar de los quehaceres, algo que nunca logramos. Jajaja
ResponderEliminarFeliz día de la mujer amiga!!!!!!
Besosssssssss
Gabriela, si te saqué una sonrisa, me alegro.
ResponderEliminarLas amas de casa nunca estamos relajadas, aunque parezcamos tranquilas, tenemos la mente a pleno funcionamiento.
Feliz día para ti también.
Un beso.
Cómo la vida misma...un beso Elena
ResponderEliminarFeliz día de la mujer...otro beso.
ResponderEliminarDOÑA ELENA
ResponderEliminarVida muy ajetreada y laboriosa la de vos. Propia de las antiguas amas de casa ya que la mayoría de las actuales prefieren irse al café a pasar las mañanas y las tardes en cotilleos con otra iguales.
En mi pueblo los bares están todas las mañanas, desde la nueve de la mañana o antes, llenos de amas de casa sentadas en mesas y en tertulia hasta las doce del mediodia, hora en que llega el marido a comer y los niños del colegio, los que no comen en el cole.
Que cómo se las arreglan para tener la casa en orden?. No saben lo que significa eso.
Por ello me felicito de que haya señoras con sentido del deber, aunque reconozco que es una vida muy dura. Y poco agradecida.
Pero la recompensa, supongo, vendrá en la mentalidad que van a tener los hijos de lo que era una madre, cuando vuelen solitos. Poco consuelo pero muy efectivo para gente seria de toda la vida.
Y es que para ser mujer .. una mujer de verdad se necesita mucho.. mucho amor.. mucho corazón.. muchos abrazos.. mucho tezón... Un abrazo para ti y todas las mujeres de tu bella ciudad...
ResponderEliminarQue dios bendiga la existencia de mujeres como tú! =)
Me falta la respiración, y eso que no has tenido tiempo de fregar los baños, barrer, planchar... Bueno, mañana que no tienes que hacer la compra; mañana será otro día, como no tienes que hacer la compra... Y espera que tus hijos tengan pareja, los domingos son apoteósicos. ¿Se puede saber por qué las amas de casa no forman parte de la población activa? Si esto no es llevar una vida activa, cómo lo llamaríamos. ¡Ah!, ya sé: gilipuertas pluriempleadas sin sueldo.
ResponderEliminarMuy ameno este texto, y apropiado para este día.
Me gusta venir a leer a tu casa.
Un abrazo, amiga y compañera de fatigas.
Sonrisa, otro beso para ti y feliz día. Y si lo puedes celebrar..., celébralo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Amigo Tellagorri, soy ama de casa, sé cuál es mi cometido e intento llevarlo a cabo lo mejor que sé, igual que si trabajase en cualquier otro lugar, intento hacer las cosas lo más perfectamente posible.
ResponderEliminarPero no creas que no me gustaría tener un trabajo remunerado, pues éste dura la jornada completa y no veo ni un duro.
La ventaja que tiene es que te administras el tiempo a tu antojo, para ello yo lo tengo muy cuadriculado y difícilmente me salgo de la cuadrícula. Cada una se administra su tiempo como puede, si están en el café de charla será porque tienen sus cosas hechas.
Yo admiro a las que trabajan fuera de casa y cuando vuelven del trabajo les espera más en el hogar.
Tampoco creas que soy un ama de casa a la antigua, no me parezco del todo a mi madre, ella es mucho más trabajadora que yo y es ejemplar su manera de llevar la casa. Ella es un ama de casa sumisa y yo para nada.
A mis hijos intento inculcarles que las tareas domésticas no son para la mujer, son para los dos sexos o para el que no trabaje fuera como es mi caso.
Un abrazo.
Mafalda, suele decirse con toda la razón que la mujer para conseguir la mitad de lo que tiene el hombre, ha de trabajar el doble.
ResponderEliminarUn beso, guapa.
Mercedes, sí ha tocado planchar, fíjate bien chiquilla.
ResponderEliminarLo que pasa es que toque o no toque hacer limpieza a fondo, siempre hay un montón de cosas por hacer, por adelantar y por pensar.
Siempre digo que el que se aburra en una casa es porque quiere, ya que siempre hay algo por hacer.
La labor de un ama de casa no está considerada para nada, es una labor muy desagradecida.
Un beso.
felicidades hoy en nuestro dia que seas muy feliz
ResponderEliminarbesos
Marina
Felicidades a ti también Marina.
ResponderEliminarUn beso.
Mª Carmen, mi caso es un poco distinto al tuyo, yo tengo niños en casa y un marido que aunque me dice que no le haga nada para cenar, me da remordimientos meterlo en la cocina al llegar del trabajo mientras yo veo la tele.
ResponderEliminarLa casa es un no parar, yo paro cuando digo "hasta aquí", aunque haya cosas por hacer.
Yo también meto muchas lechugas entre coles, jeje.
¿A qué relato te refieres al de CON NOMBRE DE MUJER?
¿Te presentaste el año pasado?
Yo me lo estoy pensando, pero no sé, no sé.
No creas que me gustan mucho esos relatos. Tampoco nunca escribí algo tan largo.
Ya veremos.
Un beso.
Genial, nuestro despertador tocan a al par.
ResponderEliminarComo te entiendo querida compañera.
Me alegro descubrir tu espacio.
Me quedo leyéndote.
Un saludo.
Hola Elena, esta vez no creo que te tenga que decir que me praes recuerdos... porque es el pan de cada día. Y el trabajo es salud. es alegría siempre que sea valorado. Te das por amor y nada cuesta cuando uno se da a los suyos.
ResponderEliminarEs un libro que empezamos a escribir muy pronto y la palabra FIN no la escribiremos nosotros.
Un beso y feliz día
P.D. Yo tambien desisti de ser doña perfecta, fue una etapa totalmente absurda, casi surrealista :)
Lola Padilla, son muchos los despertadores que suenan a la misma hora, creo yo.
ResponderEliminarVen por esta casa cuando quieras, serás bienvenida.
Un beso.
¡Ay Katy!...el trabajo es alegría siempre que sea valorado, lo malo es que este trabajo no se valora casi nunca. Yo cumplo porque lo tengo asumido, pues no trabajo fuera.
ResponderEliminarYo no desisto de ser doña perfecta porque no lo soy, lo que sí hago es intentar hacer las cosas lo más perfectamente posible, en todos los ámbitos de mi vida.
Un beso.
hola amiga. Que jornada diaria.
ResponderEliminarFelicidades por ser mujer.
Dias de sueño sin descanso,
aromas de paisajes agobiantes,
linda estancia en barullo
que se agraba con canciones.
Mujer, eres belleza,
Sentimiento por tu amar,
pasión en deseo,
dulce en el caminar.
Consuelas con palabras,
acaricias el corazon con versos,
todo lo que conlleva " MUJER "
es grato en mi cuerpo.
Elena, este simple poemilla para ti y toda mujer que se aprecie ser MUJER. Eres encantadora , amiga.
Y después de esto me voy a psicólogo que me estan entrando un no se que, que que se yo que ni me encuentro. No te quejes, que luego cuando te jubiles la Reina de la IGUAL DA te dara una jubilación que ni te cuento. Me estas estresando que no veas mujer trabajadora.
ResponderEliminarUn besooooooo
¡¡Guauuu, qué regalo más precioso Paco!!
ResponderEliminarNo podías haber pensado un regalo mejor para hoy.
Muchas gracias, eres un solete.
Un montón de besos.
Este Paco es único, que joya.
ResponderEliminarPrecioso poema.
Javier, si tú con sólo leerlo te vas para el psicólogo, dime ¿para dónde me he de ir yo que lo vivo? ¿eh?
ResponderEliminarY ¿dónde? ¿cuándo? ¿cómo me dará la Bibi una pensión?, que me la como ahora mismito, jajaja...
No caerá esa breva.
Besos.
Desde luego Lola, Paco es tan detallista que cualquier mujer estaría encantada con él.
ResponderEliminar¿Y por qué no vas a ganar, Mª Carmen?, a ti se te da muy bien el tipo de escrito que se pide en ese concurso. El año pasado ganó José Alfonso, un cordobés que vive en Valencia y Adelaida que ya la conoces.
ResponderEliminarA mí sí me parecen muchos los ocho folios, eso de enrollarme para contar lo que se puede contar en un par de hojas...
Bueno te deseo suerte.
jajaja y estoy segura de que te has callado más cosilas jajaja, mis dias desde que empece el curso ni te los cuento, no se de donde saco tiempo para hacer tantas cosas jajajaja
ResponderEliminarNo te felicito ala!!! otra cosa seria haber leido que te pasaste el dia en un Spa jajaja.
Feliz semana guapa!!!
Besitosssssssss
¿Que si he callado?, no sabes tú bien la de cosas que he callado, jajaj...
ResponderEliminar¿Un spa?, lo más cerca de un spa que he estado ha sido la ducha, jajaja...
Besos Mar.
Elena felicidades en este nuestro día, eso lo primero. Luego decirte que lo has clavado hija, es el típico día de una mujer de su casa, que no para, que aunque no trabaje fuera, esta tan estresada como la que si lo hace.
ResponderEliminarYa pase la época de levantar a mis hijos para el Cole o el Inst., ahora me toca ir al cole a recoger a mis nietos, pero por lo demás sigue igual, la casa, la compra, hasta el tirante a veces me la juega (jejeje), también las tareas, hay que estar pendiente de mi Luis si queremos que haga las tareas bien, y el ultimo comentario a mi marido, antes de irnos a la cama es, ¿que comemos mañana?. En fin que lo entiendo yo y miles de mujeres que hay en las mismas circunstancias.
A ver si llega pronto la pastillita que nos tenga alimentados todo el día y los robos que hagan las camas, pongan la lavadora etc. etc.(no estaría nada mal) así tendríamos mas tiempo para hacer los comentarios, actualizar y no tener que quedar hasta las tantas, para poder contestar a todos.
Un fuerte abrazo amiga.
Elena...
ResponderEliminarY es que razón no te falta amiga, y que bien lo has contado. Eso que ponía antes en el DNI "sus labores" pensaban que era poca monta. Ahora son sus labores, la educación de los hijos, aguantar a maridos que son estorbos, tener la casa en orden, sacar adelante su trabajo en la calle, y además, como tú, sacar tiempo para demostrarnos la inteligencia que teneis. Sois sencillamente brillantes
¡Uyyyy....! Cordobesaaaa si inventasen un robot que lo hiciera todo, ¿nosotras qué haríamos? jajaja...
ResponderEliminarPues sí hija, esto es un no parar todo el día, y cuando parece que hemos terminado, se presenta algo nuevo, nunca estamos tranquilas, además, siempre dándole vueltas al coco con las dichosas comidas.
Yo por las noches, me pongo un plato vacío por delante y mi hija se ríe, pero al final, con una tapilla de queso y una fruta, ya está.
Un beso guapa.
Ay Félix, pobres maridos, jajaja..., tampoco los llames estorbo hombre, aunque he de reconocer que algunas veces sí lo son. Además tienen un sexto sentido para intuir que acabas de fregar el suelo y se presentan ellos a pisarte lo mojado. En ese momento le retorcería el pescuezo, jajaja...
ResponderEliminarUn beso paisano.
DOÑA ELENA
ResponderEliminarSe me había olvidado comentarte un hecho indiscutible en las AMAS DE CASA.
Lo mucho que pensaís y reflexionaís cuando estaís PLANCHANDO.
Por ello, te recomiendo que para tener ideas para el escrito del Certamen que te han invitado, basta con que planches media docena de camisas y estarás en condiciones de escribir una docena de textos literarios de primera clase.
Un abrazo
¡Por Dios, Tellagorri! no me imagino a todas las escritoras de este país planchando en espera de que lleguen las musas.
ResponderEliminarDe todas formas te diré que mi cabeza está las 24 horas del día dando vueltas, si no es por una cosa es por otra, y no tengo que darle a la plancha para pensar.
Además, creo que yo no sirvo para estos relatos largos, lo que tengo que decir lo digo en un par de folios, jeje.
Pero me estáis picando la curiosidad entre todos y lo mismo me pongo manos a la obra.
Otro abrazo para ti.
Pues yo debo admitir que tengo suerte. ayer no hice absolutamente nada en casita. Mi chico se encargó de fregar, barrer, planchar, recados y cocinar. pero claro, era Lunes y el los lunes libra y lo hace siempre. Felíz día a todas, por merecidísimo. preciosa entrada, besazos!!!!!!
ResponderEliminarAprovecha Silvia, que eso no se encuentra todos los días, jajaj....
ResponderEliminarChica, en mi casa lo hago yo todo, a veces no sé ni cómo me las apaño para comentar en vuestros blog.
Un beso, guapísima.
Uy un libro, chiquilla, eso sería muy pretencioso por mi parte. Yo me limito a expresar una idea de forma concisa, breve y lo más bellamente que puedo; tampoco pretendo más.
ResponderEliminarPero lo mismo lo intento. Ya te diré.
Un beso.
Hola Elena.
ResponderEliminarSe te olvidó decir que mientras friegas los azulejos del baño, tu cabeza se desentiende del maquinal movimiento de la mano y va por libre hasta montañas nevadas, valles verdes o ríos nevados; que mientras un superfluo pensamiento del brillo que estás consiguiendo atraviesa tu frente, otro mucho más profundo se adueña de tu cerebro... y ese es el que acompaña tu rutina y la hace más llevadera.
¿Qué tal amiga?
Como sabes ya cumplí uno de mis compromisos y todo salió muy bien. Estoy muy contenta.
Tu padre me felicitó el domingo.
Ahora tengo por delante el otro que me tiene más preocupada.
Espero sentirme igualmente contenta con el resultado... y que tú estés allí para verlo.
Un beso.
Elena, por favor...!!!
ResponderEliminara qué comentario te refieres?
Me pillas ahora en el PC trabajando, si, trabajando -que te lo cuente tu cuñada Ana por lo bajini, llámala si quieres- en asuntos vinculados a esa entrada. Te doy mi palabra de honor de que no he visto ningún comentario tuyo. Jamás he censurado un comentario, ni pienso hacerlo, no estoy loco. Sin libertad de expresión -hummm...- quiénes seríamos. Corro ahora mismo al blog -te confieso que últimamente no presto atención a Calleja dela Hoguera; tengo el tiempo absorvido- y tal vez por eso, no lo he visto. Créeme si te digo que la aventura en la que me encuentro metido me hace estar al tanto de aproximadamente cerca de 200 diarios llamadas de teléfono a borbotones y contactos mil.
Pero, por favor, no te pronuncies así respecto de mi.
Paso enseguida a comprobar eso de tu comentario y te cuento.
Qué alegría verte por aquí Adelaida, cuánto tiempo!!
ResponderEliminar¿Salió todo bien? Ya lo sabía, jeje.
Felicidades y a por lo siguiente, que tú puedes.
Hija, con tanto ajetreo te vas a quedar como una sílfide, jajajja...
Ya nos veremos, un montón de besos.
José Alfonso, el día que publicaste tu última entrada te mandé un comentario bastante razonado y un poco extenso explicando mis razones para no apoyar el manifiesto de Izquierda Republicana.
ResponderEliminarHe visto cómo se iban publicando otros comentarios mientras el mío pasó a mejor vida.
Me ha extrañado mucho, pues te creo tolerante y respetuoso con las opiniones de los demás, pero si me aseguras que no lo has visto, te creo por supuesto.
En todas mis opiniones intento razonar sin echar mano jamás del insulto, por ello no entendería que se me censurase una opinión por el sólo hecho de no coincidir con la tuya.
Perdona si he pensado mal, compréndeme.
Un fuerte abrazo.
halehop!!
ResponderEliminarYa está ¿ves? Pero observa que existían otros comentarios sin comentar -combruébalo- como el de Merche Pallarés, en sentido contrario, que demuestran mi inocencia. Un beso, amiga...
Ja! Muy bueno el texto, un lujo volver a leerte.
ResponderEliminarSaludo y beso
1600 regresando
¡Bienvenido 1600! ¡Cuánto tiempo sin verte!
ResponderEliminarMe alegro.
Un beso.